Destacados Parques Temáticos PopToon Retro

Una Orca muy Mexicana

Homenaje a Keiko Parte IV

Keiko llevaba una vida tranquila en México, aun bajo la rutina de presentarse prácticamente a diario ante las miles de personas que llegaban al parque más famoso de la ciudad.

Había aparecido en comerciales de televisión local y nacional, tenía su propio tema musical y hasta un capítulo de una telenovela y una película completamente dedicada a él.

Sin embargo todo estaba a punto de cambiar cuando en 1992 representantes de una cadena cinematográfica de Hollywood, la Warner Brothers, buscaban a la que sería la estrella de una nueva película.

El Actor más grande del mundo

Póster promocional de la Película de 1993, Free Willy (Liberen a Willy).

Llegó el año de 1992 y Reino Aventura estaba por tener una remodelación debido a un cambio de administración y de socios del parque: nuevas atracciones y por supuesto, un cambio de aspecto para el delfinario, estaban contemplados. Durante este tiempo, la administración del parque buscaba obtener algunas ganancias extras, así que el permitir a Lauren Shuler Donner (Productora de Free Willy), Simon Wincer (Director) y al elenco que los acompañaba, que una película se grabara en sus instalaciones, parecía ser una idea muy lucrativa.

El argumento de la misma era “simple”: un niño huérfano de 12 años de edad de las calles se hace amigo de una orca captiva en un parque de atracciones en un estanque deplorable, controlado por un tacaño y malévolo magnate, por lo que el niño, junto a la entrenadora de la ballena y uno de sus cuidadores, deciden liberarlo de su encierro y devolverlo a su familia.

Se fijó la renta de la orca en $35,000 USD, además de los $21,000 USD diarios que costaba a la productora filmar Free Willy en nuestro país. Todo parecía miel sobre hojuelas por las ganancias que significaría que una producción tan grande se realizara en las instalaciones del parque, salvo para algunas personas, entre ellos el veterinario de Keiko, el Dr. José Luis y algunos de sus cuidadores, quienes no lo veían del todo bien, especialmente por la trama de la historia, ya que claramente era una película pro-liberación de animales y sabían de las consecuencias (buenas y malas) que ésta estaba por traer; pero aun así, con o sin la aprobación del personal, empezó la filmación.

Keiko para entonces era ya un adolescente de 15 años de edad, medía casi 7 metros de largo y mantenía el peso de 3.5 toneladas. Sabían los cuidadores de Keiko, pero sobre todo su veterinario en jefe, el Dr. Solórzano, que las filmaciones podrían ser muy estresantes para la orca, por lo que el doctor exigía que no fuera usado en todas las escenas, así que en su lugar se trajo una réplica animatrónica de idénticas proporciones y detalles que el verdadero (con todo y las lesiones cutáneas del virus) y con él se filmaron escenas que pudieran ser muy demandantes para Keiko.

Escenas de la película Free Willy © Warner Brothers

Para las escenas en libertad se mezclaron grabaciones de orcas en las costas del Pacífico entre Estados Unidos y Canadá, mezcladas con escenas filmadas con animatrónicos. Después, la escena de la captura de Willy se filmó en el Estado de Washington y se emplearon animatrónicos de orcas. Para las escenas de Willy en el parque, las grabaciones se hicieron en Reino Aventura como se acordaron: se alternaron Keiko y el animal mecánico; las escenas en las que Willy es visto tras un cristal de acrílico, en realidad era un set con el animal animatrónico; hay una escena en la película en la que el niño Jesse (Jason James Richter), cae accidentalmente a la piscina de Willy y éste último lo rescata; para crear la escena, ésta se filmó por partes, mezclando a la orca real con la animatrónica y a Jason se le intercambiaba con un doble (un muñeco). En otra escena, en la que el niño montaba a la orca, ésta era en realidad el animatrónico, esto con tal de que a Keiko no le molestara llevar al niño en su espalda. En otra escena, en la que se le hacen estudios a Willy, este es colocado en una red para examinarlo, pero este no logra llevarse a cabo, pues es tal el estrés que ve Jesse en él, que tras un descuido de los entrenadores, lo libera de las redes. Para esa escena fue usado igualmente el animal animatrónico y cuando se suelta de las redes vemos al verdadero Keiko salir del corral marino hacia la piscina principal. Por último, la escena final en la que Willy es liberado, se recreo a la orca en imagen CGI (por computadora), se alternaron escenas con la ballena animatrónica y ésta se grabó nuevamente en el Estado de Washington.

Tras un año de producción entre los Estados Unidos y México y en dos horas de proyección en pantalla, Willy era liberado; la escena era mágica, esperanzadora, muy romántica al puro estilo Hollywoodense. Se decidió colocar un número telefónico en los créditos de la película para apoyar el rescate de ballenas en el mundo; los teléfonos no tardaron en empezar a sonar.

¡Liberemos a Keiko!

La película Free Willy es todo un éxito internacional, las recaudaciones en taquilla son altas, ya que se habían invertido $20 millones de USD en la producción y se obtuvieron $153.6 millones de USD de recaudación; millones de personas quedan cautivadas a nivel mundial con la historia y especialmente con el final, pero también crea una consternación en el mundo: ¿Qué hace una orca en un estanque tan pequeño, muy lejos de su familia, actuando para una parque de atracciones y peor aún, tan lejos del mar como lo está la Ciudad de México?

Entonces sucede lo inevitable: comienzan a llegar cartas a Reino Aventura de todos lados exigiendo una sola cosa: la inmediata liberación del animal. El mensaje es básicamente el mismo:

“Si Willy pudo ser liberado en cuestión de días en la película, Keiko también podría serlo en la vida real”

Michael Jackson en una visita a Reino Aventura

La presión mediática iba en aumento; Reino Aventura llegó a considerar la posibilidad de vender a Keiko a otro parque con tal de buscarle una pareja, ya que oficialmente estaba en edad reproductiva, pero debido al papiloma que tenía en su piel, ninguno quiso aceptarlo; ni siquiera Sea World, ya que esta enfermedad podía ser contagiosa para sus propios animales, o al menos eso es lo que decían los veterinarios de dicha cadena. Cada vez miles y miles más de cartas llegaban de todas partes del mundo, tanto a la Warner Brothers como a Reino Aventura: ¡Keiko debía ser sacado de México inmediatamente o de lo contrario pronto moriría! Hasta Michael Jackson (quien además interpretó el tema final de la película: “Will You Be There”) llegó a considerar la posibilidad de comprarlo, pero desistió al saber el costo de su mantenimiento.

Todo el personal que estaba relacionado con Keiko de un día para otro eran el enemigo, medios de comunicación internacional como la revista Time le dedicaron un artículo, en el que se decía que “la orca no está en las mejores condiciones, está en bajo peso, su aleta colapsada, no come suficiente y tiene una enfermedad que podría matarlo”.

Por otro lado, la prensa mexicana, la misma que alguna vez promocionó visitarla e invitó a conocerlo, ahora también exigía la liberación del animal. En la administración del Nuevo Reino Aventura todos están vueltos de cabeza, no saben qué es lo mejor que se puede hacer. Construir un nuevo estanque en Reino Aventura costaría hasta 15 millones de dólares y mover a la ballena era un riesgo, ya que si algo salía mal y se caía podría matarlo; incluso no faltó quien llegó a sugerir salar el Lago de Tequesquitengo en el Estado mexicano de Morelos y “liberarlo” en él.

David Phillips, co-fundador y director del Earth Island Institute y fundador de la Free Willy-Keiko Foundation

Un día, un hombre procedente de Estados Unidos llegó a Reino Aventura diciendo que podía construir un tanque para rehabilitarlo y reintroducirlo a su hábitat. El ahora director del parque, Oscar Porter, le contestó que si conseguía crear las instalaciones adecuadas para rehabilitarlo, no sólo le apoyaba con el traslado, prácticamente lo cedía. El hombre era David Phillips, perteneciente a una sociedad ambientalista llamada Earth Island Institute, la cual estaba en pláticas con el acuario del Estado de Oregon, Estados Unidos, para crear dentro de sus instalaciones el que sería el tanque principal para rescate de cetáceos. Así que con un capital inicial de 4 millones de dólares, el 1 de Noviembre de 1994 se crea oficialmente la Free Willy – Keiko Foundation, integrada por la Warner Brothers, el Earth Island Institute, el millonario de las telecomunicaciones Craig McCaw y algunos de los entrenadores de Keiko. Miles de niños al rededor del mundo habían hecho pequeños donativos con tal de “salvar a la ballena”.

Muchos insistían que Keiko “no podría ser reintroducido en su hábitat, debido a que al ser ya una orca demasiado mayor no podría sobrevivir, pues no es posible que después de tanto tiempo se le enseñe lo básico para sobrevivir después de haberse acostumbrado al cuidado del hombre”. Uno de los que opinaban así era el mismo veterinario en jefe, el Dr. José Luis Solórzano, pero nadie le escuchaba, ahora incluso él era considerado uno de los “verdugos” de Keiko.

La presión no disminuía, eran miles y miles las cartas las que llegaban a Reino Aventura constantemente, los medios de comunicación no cesaban, los teléfonos siempre sonando… Finalmente en Febrero de 1995 Reino Aventura dona a Keiko a la Free Willy Foundation y se da a conocer que se estaba construyendo un tanque hasta 5 veces más grande que el de Reino Aventura en el poblado de Newport, en Oregon, el cual tuvo un costo final de $7.3 millones de dólares, de los 20 millones que tenía la fundación para entonces.

Fue así que la conmoción llegó a todo el personal que cuidaba a Keiko, pero si era la mejor manera de ayudarlo, no había alternativa: Keiko se iría de México para siempre.

¡NO TE DESPEGUES Y SIGUE CONOCIENDO MÁS EN REAL LIFE CARTOON! Haz clic aquí para ver la quinta parte de esta historia

One Comment

Leave a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*