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La Magia de la Cámara Multiplano de Disney

Walt Disney se caracterizó por ser un gran visionario creativo, pues para sus largometrajes animados, siempre buscó que sus creaciones fueran no sólo simples dibujos con movimiento, sino que éstos fueran recreaciones del mundo real que el público sintiera como tangibles, dándoles la sensación de profundidad a los mismos y ningún otro invento lo lograría con el nivel de excelencia y calidad que permitió la Cámara Multiplano, la cual sin duda, permitió a la compañía llevar la animación a niveles nunca antes alcanzados y cuyos principios de operación incluso hoy en día se emplean, aunque de una manera un tanto más sofisticada. Cómo funcionaba éste invento es lo que se explicará en el siguiente artículo, el cual espero sea de su agrado.

Un poco de historia

Ub Iwerks, co-creador de Mickey Mouse, fue de los primeros en construir un prototipo de cámara multiplano en 1933.
Publicado originalemente el 20 de Marzo del 2019

La primer cámara multiplano de la que se tiene constancia de su existencia fue inventada en Alemania en 1923, para filmar un largometraje creado a partir de la técnica de siluetas, titulado Die Abenteuer des Prinzen Achmed (1926), producido por Charlotte Reiniger y su marido Carl Koch. Curiosamente, con una duración de 65 minutos, ésta película es considerada como el largometraje animado más antiguo que aún se conserva, incluso anterior a Snow White and the Seven Dwarfs (1937) de Disney, pero a diferencia de ésta última, tiene la peculiaridad de haber sido filmada con láminas delgadas de plomo y cortes de cartón en vez de dibujos sobre celulosa. Posteriormente, uno de los colaboradores de Reiniger, Berthold Bartosch, perfeccionaría la cámara y en 1932 crearía el filme L’idée, en el cual se emplearon hasta 18 filminas transparentes, distribuidas en 4 capas.

Mientras tanto, al otro lado del océano, en los Estados Unidos, en 1933, Ub Iwerks, tras haber dejado temporalmente los estudios Disney y creado el propio, con ayuda de partes de un viejo auto Chevrolet, diseñó y construyó la primer Cámara Multiplano en América y más tarde, en 1937, el ingeniero William Garity de Disney, la perfeccionaría y construiría la propia para la compañía.

La cámara creada por Garity se probaría por primera vez para producir el corto The Old Mill (El Viejo Molino) y más tarde se utilizaría para filmar Blancanieves. Posteriormente se usaría en escenas de Pinocho (1940), Fantasia (1940), Dumbo (1941) y Bambi (1942) donde es especialmente notorio su uso al principio y al final de la misma.

Fragmento de Bambi, filmado con la cámara multiplano (1942).

Hoy en día se conservan, al menos en exhibición, 3 cámaras de este tipo, las cuales fueron utilizadas para rodar todas las películas de Disney hasta 1989, siendo La Sirenita la última en filmarse con esta icónica herramienta, siendo reemplazada por las computadoras (técnica CAPS) para filmes como Aladdin, The Beauty and the Beast o Tarzán (donde es incluso aún más notoria la técnica, al mezclar escenarios totalmente digitales con los dibujos a mano de los personajes).

Funcionamiento

Como todos sabemos, los dibujos son creados en 2 dimensiones, aun cuando se empleen sombras para reducir la sensación de planicidad. Walt Disney sabía esto perfectamente y debido a que buscaba que los dibujos tuvieran cierto aire de realismo con profundidad en sus películas, fue que se pensó en emplear esta tecnología por primera vez en sus producciones.

La descomposición de una imagen en planos permite hacer simular acercamientos en 3D.

Si vamos, por ejemplo, caminando por el campo con la luna llena detrás de nosotros, notamos que la luna pareciera seguirnos, pero, si de repente caminamos hacia donde está ella, ésta permanece inmóvil. Cuando se quiere animar este mismo efecto con dibujos, uno pensaría que podría simplemente hacerse un acercamiento, pero literalmente se acerca todo el dibujo, haciendo que todo se vea más grande, incluida la luna; es por eso que se pensó que para evitar ese efecto de zoom, se descompondría la imagen en capas, teniendo a la luna en un plano fijo al fondo, con respecto a la cámara al frente y en medio de éstas se encontraría el resto de los planos de la imagen, descompuesta en capas individuales, que se moverían de tal manera que al acercarlos a diferente velocidad, pareciera que somos nosotros quienes nos desplazamos dentro del escenario, tal como sucedería si lo hiciéramos en uno real.

Disposición de planos en una cámara multiplano con la cámara localizada en la parte superior.

Para hacer más fácil la operación de este sistema, se decidió que la cámara con la que se fotografiasen las imágenes, quedara en la parte superior y cada capa (hasta 7 en total) sería posicionada con ayuda de un sistema de poleas y manijas, sobre la cual se montaría cada una de las filminas de vidrio con los elementos pintados, ya fuese en óleo sobre los mismos o bien las imágenes de los personajes en celulosa.

El camarógrafo, con ayuda del ocular de la cámara, guiaría al resto de los operadores de cada una de las capas hasta obtener la imagen deseada, aunque desde su personal punto de vista, vería algo así como un dibujo plano, pero al mover cada una de las capas y fotografiarlas en secuencia, a un total de 24 fotografías para componer un segundo, es cuando finalmente nuestra retina ya no puede distinguir imágenes individuales y ¡la sensación de inmersión se logra!

Fragmento de Pinocho (1940)

Legado

La cámara multiplano sin duda marcó un antes y un después en cuanto a técnicas de animación, pero no fue el único invento durante la década conocida como la Era Dorada de la Animación (años 1930’s), de hecho, los estudios Fleischer, (creadores de Popeye El Marino y Betty Boop) también desarrollaron el suyo; se trataba de un aparato conocido como Cámara estéreo-óptica, el cual simulaba la tridimensionalidad al filmar entre modelos de figuras a escala, los cuales eran rotados dando la ilusión de un movimiento esférico, mientras enfrente de la maqueta, se colocaba la filmina del personaje en celulosa. No obstante, la cámara multiplano prevalecería sobre ésta última, debido a que, por su manejo en capas, podía permitir incluso simular movimientos rotativos, tal como sucede en la escena de la transformación de la Reina Malvada de Blancanieves en una anciana decrépita, dejando a la cámara estéreo-óptica relegada, como un “mero objeto de trucos” para sorprender a las audiencias y no como un instrumento práctico y visionario para producir animación de manera profesional.

La escena en la que el Rey Tritón dibuja el arcoíris al final de La Sirenita, fue creada con la técnica CAPS, sucesora de la Cámara Multiplano.

Actualmente ya no se emplea la cámara para producir animación, en su lugar, haciendo igualmente el uso de capas para simular tridimensionalidad, se desarrolló la técnica CAPS (siglas de Computer Animation Production System o Sistema de Producción de Animación por Computadora), la cual consiste en entintar digitalmente los dibujos y acomodarlos por capas, tal como se haría en una cámara multiplano, pero ahora en un entorno computarizado. Su gran ventaja sobre la cámara multiplano es que los dibujos ahora podían combinarse con escenarios totalmente tridimensionales (CGI), reduciendo enormemente los costos de entintado y fotografiado, y uno de los primeros grupos de animadores en emplearlo – y de hecho en crearlo – fue el de Pixar, quien al principio usó este sistema para animar algunas escenas de La Sirenita (especialmente notorio en la escena del arcoíris al final de la película) y más tarde se emplearía en el resto de las producciones animadas de la Segunda Era Dorada de Disney en los 1990’s.

Sin embargo, no se puede olvidar la importancia que tuvo la cámara de Garity, sin la cual , muchas de las películas de Disney, no hubieran sido las mismas que conocemos y disfrutamos incluso en años recientes.

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