Desde el año 1972, la “International Animated Film Association” se ha encargado de entregar los premios Annie a lo mejor de la animación internacional desde su sede en California.
El gran ganador este año ha sido Netflix, viendo recompensada su gran apuesta por el contenido animado. El streamer ganó 19 premios de 32, sobre todo a través de su apuesta estrella por la animación tradicional y familiar con “Klaus” del estudio español SPA dirigido por Sergio Pablos.
“Klaus” ganó 7 categorías: mejor película animada, edición, storyboard, dirección, animación de personajes, diseño de producción y de personajes. De manera acertada, Netflix eligió a “¿Dónde está mi cuerpo?” del francés Jérémy Clapin para participar como mejor animación independiente, categoría que ganó así como el premio a música y guión.
Netflix fue exitoso no sólo con cintas, sino con series como Bojack Horseman, Ask the Storybots, Tuca and Bertie, Carmen Sandiego, y Love, Death and Robots.
En cambio, el gigante de la animación con el que crecimos sólo se llevó seis premios. Disney ganó con sus producciones Frozen 2 (voces, efectos especiales en animación), Mickey Mouse shorts (dirección para tv, serie para niños), Avengers: Endgame (animación de personajes con live-action) y Bob’s Burgers (doblaje de voz para tv).
Las grandes sorpresas fueron también aquellos que no lograron un premio, como Toy Story 4, Missing Link de Laika y How to train your Dragon: The Hidden World de Dreamworks.
Sin embargo Dreamworks no se quedó con las manos vacías, llevándose el premio por producción especial con How to Train your Dragon Homecoming.
¿Será que los Annie Awards nos servirán como indicadores para el performance de las películas animadas con nominación al Óscar? Los perdedores de estos premios, Toy Story 4, Missing Link de Laika y How to train your Dragon: The Hidden World competirán contra las grandes sorpresas de Netflix, Klaus y I lost my Body.
Por una parte, los Óscares han favorecido a las películas en 3D creadas en norteamérica en los últimos años, desde el 2004 hasta el 2019.
Sin embargo, parece que muchos se han saturado de la animación computarizada con grandes efectos, y la tendencia mundial ha ido re-valorando a las producciones en 2D ya sea para televisión o cine.
La última gran producción animada en 2D que ganó un Óscar, fue “El viaje de Chihiro” en el 2003 por el estudio japonés Ghibli.
¿Presenciaremos el milagro de la animación en dos dimensiones ganando nuevamente un Óscar gracias a Sergio Pablos? Lo averiguaremos con la 92 edición de los Premios de la Academia, este 9 de febrero.
Créditos de Imagen
©Netflix
Con información de Cartoon Brew y The Hollywood Reporter.